Capitulo 39

Sara y Mariana salen juntas de la clínica. Sara está feliz.
--¡un hijo... un hijo mío y de Guillermo¡¡
No es algo que ninguno de los dos planeara, de hecho ni pensaron en esta posibilidad pero es algo que la llena de dicha.
--estoy bendita por dentro...

Guillermo está labrando la tierra como un campesino más. Sara lo llama.
--¡¡mi amor...¡
Guillermo corre hacia ella. Todo sudado, sin camisa. Ella lo mira con deseo.
--¿¿qué miras? --le pregunta él pícaro.
--Me extraña ver a un hombre de mar como tú convertido en un campesino...
--¿no te gusta?
--Me gusta todo de ti...
Ella lo abraza.
--no, que estoy todo sudado...
--me encanta esa olor a ti.
Él le guiña el ojo. Ella lo abraza y lo besa:
--luego nos duchamos juntos... --dice ella.
--por mi encantado.
Se miran seductores y se besan apasionadamente.
--¿porque saliste?
--tengo una sorpresa...
Él la mira fijamente.
--¿que ocurre?
--¿porqué?
Sara esta radiante.
--No sé Silvia, algo ha cambiado... Noto en tu mirada algo que... no sé...algo ha cambiado...
Sara lo abraza:
--¡¡estoy felz... feliz¡¡ ¡¡te amo... te amo...¡
--pues gracias --dice él sorprendido-- pero ¿me puedes decir que cambió?
--si cambio algo... y más que va a cambiar...
--¡ya Silvia, me estas poniendo nervioso¡
Sara agarra la mano de su amado y se la pone en el vientre:
--es lo más maravilloso que nos podía pasar... un hijo, un hijo fruto de nuestro amor...
Guillermo la mira con el rostro desencajado por la sorpresa:
--¿¿qué?
Sara lo abraza y lo besa:
--que llevo vida dentro de mí, tu semilla... ¡que me has preñado, Guillermo¡
Guillermo se lleva las manos a la cabeza.
--¿pero estás segura?
--sí, el médico lo confirmo ya sé que es muy pronto que todo ha sido muy rápido y yo no quiero que tú te sientas comprometido conmigo yo...
Guillermo la interrumpe con un beso y la abraza, la abraza.
--¡¡un hijo, un hijo... ¡¡¡¡voy a tener un hijo¡
La pareja está entusiasmada.


Guillermo y Sara salen desnudos de la ducha. El uno va secando al otro. Se acercan a la cunita del bebé. Él tiene sus manos en el vientre de ella:
--no puedo creer que dentro de ti crezca un ser que vaya a ser un pedacito tuyo y mío.
Sara lo mira con amor, le acaricia la mejilla:
--¿te hace ilusión ser papá?
--claro que si me preocupa por ti porque son dos muy seguidos pero bueno pasó... la culpa es mía por descuidarme
--en el fondo lo deseábamos...
Los dos se besan muy enamorados.
--te juro que no habrá diferencia entre Diana y nuestro bebé... los voy a querer a los dos por igual.
Ella lo besa y lo acaricia.
--Lo sé pero a mi me hace ilusión tener un bebe fruto de nuestros cuerpos. Resultado de nuestro inesperado pero apasionado amor que nació en el mar...
Guillermo la mira pícaro. Se besan apasionadamente.
--pero tenemos que arreglar tu situación, quiero que estemos casados para cuando nazca nuestro hijo.
Sara siente que Guillermo no la dejará pase lo que pase pero tiene miedo de la reacción de la familia real.
--para mi las cosas están bien...
--¡¡pero mi no... quiero que mi hija sea la hija de Silvia no de la Ana que yo inventé¡
Sara siente triste de que ambas identidades sean falsas.
--¿y mi marido? ¡¡él me quería muerta¡
--¡¡ya es hora que pague... no puede ser que esté libre después de lo que te quiso hacer¡¡
--pero es que ahora soy vulnerable... tengo miedo que le pase algo a nuestro bebé...
Guillermo acaricia el vientre de su amante:
--yo los protegeré...
--pero es que mi bebé es tan frágil, además está ese contrato... Tengo miedo que me puedan quitar a mi hija...
Sara tiene mucho miedo, es un miedo real por su seguridad aunque también teme que Guillermo no perdone su mentira.
--Yo voy a sacar la cara por mis hijos...
Ella lo acaricia en la mejilla:
--deja que sigamos ocultos... por favor... deja que yo viva mi embarazo feliz...
--está bien pero una vez tengamos a nuestro hijo con nosotros lucharemos por tu libertad...
--si claro.
Ella lo abraza. Él está entusiasmado, ella se aferra a él. Ha conseguido un tiempo, un tiempo para alargar su sueño antes que se pueda convertir en una pesadilla.

Emilio va a visitar a Sara y Guillermo. Tiene en brazos a su sobrina. Acaricia el vientre de su hermana:
--y pronto serán 3... La hija de Mariana y tus dos bebés…
--bueno... para eso falta mucho...
--¿eres feliz?
--mucho... Guillermo es un hombre maravilloso...
--¿y a que esperas a decirle la verdad? Yo creo que es mejor que lo sepa por ti...
A Sara le da terror pensar en el momento en el que Guillermo descubra que es la esposa de su amigo:
--¡¡no me va a entender... no me va a perdonar¡¡
--esperan un hijo, si te ama... Te perdonará... ¿o es que tienes miedo que no te ame tanto como crees?
--No claro que no... Guillermo se la jugó por mi... Me ama...
--¿y entonces cual es tu miedo?
--A veces el amor no es suficiente... Yo amaba a Enrique y sus mentiras destruyeron ese amor... tengo miedo que Guillermo se desilusione y deje de quererme... Él quiere a Enrique como a un hermano... será muy duro para él saber que es un asesino...
--Por lo mismo, ¿cómo estás segura que no están en contacto?
--él me lo prometió...
--sí pero si no sabe que eres de la familia real, no sabe cuan grande es el peligro que ambos corren...
--pues yo espero que en serio me haga caso... yo le hice ver que es peligroso que hable a Ascot porque lo pueden localizar... ahora que estoy embarazada me lo consiente todo...
--Pues espero que todo salga bien... Guillermo se ve un chico estupendo... Nunca me gustó Enrique que me miraba por encima del hombro, aunque lo conozco poco Guillermo siempre ha sido muy amable conmigo... Nada me gustaría más que poder acompañarte al altar para casarte con el hombre que amas como no pude hacer ese día...
Sara se acaricia el vientre feliz:
--no sabes cuanto lo amo y este bebé que es una parte de él es lo más grande que me ha dado la vida... ¡¡lo llevo dentro... Guillermo está dentro de mi, su semilla crece en mi cuerpo y eso es para toda la vida¡¡
Sara está muy enamorada. Es una mujer verdaderamente feliz.
--espero que todo sea para bien, que nunca tu sueño se convierta en una pesadilla --Emilio .
--Me muero si lo pierdo pero todo saldrá bien... tiene que salir bien...