jueves, 11 de marzo de 2010

Capitulo 13


Sara a los pies del barco de Guillermo grita como una loca después de haber sido mojada por la manguera de él.
--¡¡que pena contigo¡¡
Sara está furiosa:
--¡¡no sea confianzudo...¡¡¿¿usted no sabe quien soy?
Guillermo habla muy tranquilo, aunque Sara no hace más que insultarlo a él le gusta mucho. Sonríe coqueto:
--No, pero me encantará conocerte yo soy...
Sara lo interrumpe:
--¡¡no me importa como se llama, imbécil¡¡
Guillermo sonríe fascinado lo que enfurece más a Sara que no deja de insultarlo.
-¡¡es usted de lo peor¡
--mis amigos dicen que soy buena persona, si me dejas... –dice él sonriente.
Sara lo interrumpe de nuevo:
--¡¡ni loca lo conozco más... y no me tutee¡
--que pena contigo... he sido un bruto, porque no subes con tu amiga y...
--¡muérase¡ --lo interrumpe Sara.
La agresividad de Sara fascina aún a Guillermo:
--pues espera que yo bajo ni que sea para secarte un poco...
A Sara y a Blanca les asusta mucho que ese hombre vaya a bajar:
--¡¡ni se le ocurra¡¡
Guillermo se muestra muy amable, le hace gestos:
--espérate... ahora bajo...
Guillermo desaparece. Sara y Blanca se miran nerviosas.
--¡¡cretino¡ --Sara.
--¿¿y ahora qué hacemos? --Blanca.
A Sara Guillermo peor no le podía caer.
--¡¡¿¿qué se habrá creído ese imbécil?¡¡
Sara no lo duda y corre junto a Blanca. Guillermo baja del barco corriendo, muy ansioso y con una toalla. Va mojado en bañador. No hay ni rastro de Sara. No le sorprende aunque le da pena.

Sara y Blanca han huido de prisa.
--¡¡no te pares¡¡ --Sara.
--no puedes más...
Sara mira hacía atrás con miedo a que Guillermo los siga:
--¡¡es que ese energúmeno nos puede seguir¡¡
--necesito descansar...
Sara agarra de la mano a su amiga:
--ya vamos y más tranquilas salen del puerto...





Guillermo esta muy ansioso:
--¿¡quien será esa mujer tan bella? ¡¡tengo que volver a verla...
Corre a ambos lados con la esperanza de ver su rastro. Se lleva la mano a la cabeza:
--¡¡no se la pudo tragar tierra¡
Sonríe pícaro:
--era tan linda, nunca vi a una muchacha tan linda... ¡¡tengo que volver a verla, no pudo ir muy lejos¡
Y decide ir por el camino hacia dónde ella se ha escapa. Piensa que si va rápido no tardará en encontrarla. Pero en ese momento oye unas risas:
--¿¡qué haces en esas fachas?¡
Es Enrique. Guillermo no sabe qué hacer, si atender a su amigo o ir tras Sara.
--¿¡qué te pasa?¡
A Guillermo le ha gustado en serio Sara:
--¡¡ahora no puedo explicarte... espérame¡
Guillermo tira la toalla sale corriendo por el mismo lado en el que huyeron la princesa y su dama de compañía. Enrique se ha quedado perplejo. No sabe qué hacer y opta por seguir a su amigo:
--¡¡Guille, espera¡
Guillermo corre a toda velocidad. Se acerca rápidamente a donde están Sara y Blanca que van saliendo del puerto. Enrique le pisa los talones a su amigo. Blanca está muy cansada, va muy deprisa.
--¡¡venga, vamos...¡¡
--ya no llegará... descansemos...
Y en ese momento, aunque de lejos ven a Guillermo. Sara grita.
--¡¡es él¡
Ambos gritan como si fuera un peligro. Guillermo se siente avergonzado, corre hacia ellas que huyen aterrorizadas.
--¡¡no te vayas... sólo quiero ser tu amigo¡¡
Sara logra parar un taxi y las dos amigas huyen justo en el momento que Guillermo las va a atrapar. Éste queda agotado y rabioso viendo como se va el taxi. Va en bañador y descalzo. La gente lo mira raro.
--¡¿¿ustedes que miran?¡
Enrique llega hasta su amigo sorprendido por ese ataque de locura de Guillermo, le pone la mano en los hombros fraternalmente al ver que Guillermo de espaldas a él mira la carretera triste.
--¿¿qué te pasa?
Guillermo está furioso porque se le ha escapado ese joven que lo ha cautivado como jamás ninguna mujer lo había cautivado. Además le molesta ver que todo el mundo lo mira a él como si fuera una atracción de fiera. Y de la misma manera rápido en la que llegó desaparece. Resignado Enrique lo sigue de nuevo.
--¡¡enloqueció¡

Blanca y Sara huyen del puerto.
--¡¡no debimos salir sin los escoltas¡ --Blanca.
Las dos chicas están muy exaltadas:
--¡¡si ya lo sé... ese depravado nos pudo hacer cualquier cosa¡¡
--¡¡sí es que además Enrique se puede enfadar mucho con nosotras si sabe que nos habló ese tipo¡¡
--Bueno en todo caso se enfadará conmigo... tú eres libre y podrías salir perfectamente con ese patán...
Aunque no ha pasado nada entre ellos, aunque de hecho está distanciados, Blanca le quiere guardar fidelidad a Enrique. Las palabras de su amiga le han molestado porqué le hacen ver que la única que tiene derechos sobre Enrique es Sara y aunque le duele eso la reafirma en la idea de no volver a verlo:
--¡¡no claro que no¡¡¡¿cómo se te ocurre que me iba a fijar en ese tipo?
--¿porqué no?
Y Blanca sabe que no tiene derecho a decir que se ha enamorado del hombre que va a ser su esposo. Está nerviosa y para que su amiga no sospeche nada dice lo primero que se le ocurre:
--¡¡tú lo has dicho... es un patán¡¡




Guillermo llega a su barco. A ese mismo punto en el que conoció a Sara. Sonríe fascinado:
--te tengo que volver a ver...
Su corazón palpita con fuerza:
--¡¡no puede ser que el destino la haya traído a mí para que se me escape¡¡
Guillermo agarra la toalla:
--es tan linda, parece una flor... ¿quien será? Nunca la había visto por aquí... ¿cómo se llamará? Con lo bella que es tiene que ser nombre de flor Rosa, Amapola y tal vez Margarita...
Enrique muy cansado llega hasta él:
--¡¡se puede saber qué te pasa??
Guillermo le sonríe, no le dice nada. Sube a su barco.
--¡¡después de hacerme correr por todo el puerto no me vengas con esta¡
Guillermo quita el ancla y comienzan a navegar. Él maneja el barco con Enrique a su lado:
--es que no piensas decirme nada en todo el viaje...?
Con una sonrisa dice:
--he conocido a la muchacha más linda del mundo...
Enrique lo mira sorprendido pero contento:
--¿tú?¿enamorado?
Cuando ya se han alejado lo suficiente, Guillermo vuelve a echar el ancla.
--No sé si estoy enamorado...
Guillermo siente un fuego que lo ahoga, se lanza al agua para tratar de apagarlo. Enrique se desviste con rapidez y se tira al agua con su amigo. Los dos nadan por largo rato. Cuando salen Guillermo se seca con la toalla que le iba a dar a Sara. Luego se sienta en cubierta:
--¿crees en el amor a primera visto...?
--sí, a mi me paso con Blanca...
--Pues ya entiendes lo que me pasa...
Enrique lo mira sonriendo:
--nunca te había visto sonriendo, creí que el amor no era para ti... Nunca te conocí una mujer que me hiciera sentir asi...
--yo tampoco pensé que te ibas a enamorar...
Los dos amigos sonríen. Les parece chistoso que ambos se hayan enamorado a la vez.


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