Capitulo 25

Guillermo va hablando a la chica muy animadamente. Llegan al suelo.
--¿te acompaña al auto?
Sara se pone nerviosa. No quiere que su amigo la vea con un coche tan lujoso.
--quiero recordarte siempre en tu barco...
--¿volverás?
--claro que sí...
Ella se va, va mirando atrás. Guillermo se queda embobado mirando hacia allá.

Pocos segundos después que el auto de la princesa se vaya llega el del príncipe. Se encuentra a su amigo mirando hacia donde viene él.
--¿me esperabas?
Guillermo sonríe con cara de enamorado.
--es que recién vino ella...
--¿quien?
--la mujer que me gusta...
--¡¡cuenta, cuenta¡ --dice Enrique con interés.
Los dos amigos suben al barco. Enrique le pone la mano en los hombros.
--¡me tienes que contar todos los detalles¡
--tampoco hay mucho que contar...
Enrique mira a su amigo:
--con esa cara de gusto? Algo pasó.
Los dos amigos sonríen en cubierta.
--no, nada de lo que tu mente enferma piensa.
Los dos amigos sonríen. Guillermo tiene una sonrisa pícara recordando el momento que ella lo vio desnudo.
--No sé porque siento que ocurrió algo entre ustedes...
--que no...
--bueno... pero algo me tendrás que contar ella... ¿¿quien es?¿cómo es?
--es lindísima...
--eso decimos todos... ¿No tendrás una foto?
--¿de ella? claro que no...
--A ver si se la pides o me la presentas... Me muero por conocer a la mujer que le ha robado el corazón a mi amigo el sensato...
Los dos amigos van hablando sentados en cubierta muy animados entre bromas.

Enrique y Guillermo van hablando en el barco. Guillermo le ha contado lo que ha pasado con la supuesta Silvia. Enrique se te ríe:
--¿¿te vio en bolas?¡ vaya que lanzada...
--se moría de la pena...
--¡esa tenía ganas de verte las pelotas¡¡
--no hables así de ella, lo ha pasado fatal...
--Tú eres tonto... ¿porqué te crees que subió sin pedir permiso? Eso no lo hago ni yo...
--si bueno... me extrañó pero...
Enrique no lo deja seguir y muy seguro dice:
--necesita un polvo... el marido debe ser un imbécil que no da la talla y busca en ti lo que ese imbécil no le da...
--Ella no es así... nuestra relación es limpia...
Enrique mira a su amigo burlón:
--no me digas que no te apetece acostarte con ella...
Guillermo se excita recordándose desnudo junto a ella. Con celos y con pena dice:
--espera un hijo.
--¿se le nota?
--no.
--aún puedes divertirte...
--¡no seas bestia¡ ¡¡¿además no eras tú el que me aconsejaba que me alejara de ella?¡
--sin un polvo sí, pero si te la tiras merece la pena arriesgarte. Seguro que el marido es un don nadie al que puedes pisar en seguida...
--¿sabes? se llama Enrique...
--vaya... --dice él con ironía-- y ella no llamará Sara ¿no?
--¡¡claro que no...¡¡ ¿¿¡como me iba a fijar en tu esposa...?¡ ella es demasiado artificial como para despertar algo bonito en un hombre...
--eso es cierto, pero era broma... Además Sara es una princesa... es como mi madre que te ve como una subpersona...
--que bueno que no la conoceré nunca y que me Silvia es totalmente diferente. Una mujer honesta, de verdad.
--Ninguna mujer honesta busca lo que no se le ha perdido con un hombre sola en un barco... ¡¡desnudo¡
--busca mi amistad...
--¡¡ja¡
--yo sé que Silvia es honesta...
--Es casada y engaña al marido porque no creo que él sepa que te viene a ver...
--¡claro que no¡¡
--una mujer honesta no engaña. Además si sólo buscará tu amistad no se arriesgaría tanto...
El corazón de Guillermo late con fuerza:
--¿tú crees?
--yo que te lo digo... Esa Silvia estoy seguro que no es lo que tú crees... Mi Blanca si te gustaría pero ella es mía...
Se hace un silencio. Enrique sigue hablando:
--Ella te quiere conocer y a mi me gustará que la conozcas.
--mejor no...
--¿porque?
--es tu amante...
--es la mujer que yo amo...
--lo siento. Es una situación que a mí no me gusta...
--¡¡pero tú ahora estás con una mujer casada¡¡
--¡¡no es mi amante¡¡
--tiempo al tiempo...
Enrique está decepcionado porque su amigo no quiere conocer a la mujer que ocupa su vida, su cama. Guillermo tampoco quiere que su amigo se enfade con él:
--quedamos que mejor sin mujeres... que este es un lugar solo para nosotros...
--Tu Silvia bien que viene...
--No seas injusto, es mi casa... Además no creo que te convenga que te vean con Blanca...
--es cierto pero es que a ella le hace ilusión y a mí me gustaría tanto complacerla. Ella lo da todo por mi y yo sólo le ofrezco una vida en las sombras... ¿podríamos quedar a cenar los 4?
--¿le vas a decir a Sara que cene con tu amante? --sorprendido.
Enrique golpea a su amigo en la pierna aunque de broma:
--¡¡no tonto... a Silvia...¡ ¡habla con ella...¡
--recién la conozco... además se le hará raro que la invite a cenar con el Príncipe y su amante... Lo siento pero es la realidad... Podrías ofender a Silvia...
A Enrique no le hace mucha gracia pero lo entiende.
--¿no te enojas?
--no claro que no...
--¿nos damos un baño?
--No, quiero estar con Blanca,...
Guillermo se da cuenta que a su amigo le ha ofendido que no quiera conocer a Blanca:
--lo siento, es lo mejor...
Enrique fuerza una sonrisa, dice que no le importa aunque sí está dolido...

Mientras en Palacio, Sara está hablando con Blanca. Le ha contado lo que ha pasado con Guillermo.
--¿¿lo viste desnudo?¡¡
Sara se cubre la cara con vergüenza.
--¿y es guapo?¿está bien dotado? --pregunta con ironía.
Sara se escandaliza.
--¿¿¡como me preguntas esto??¡
--bueno, no tendría nada de malo...
--¿¿olvidas que soy casada?¡
--¿y tú crees que Enrique te es fiel?¡
--¡¡claro que sí¡¡
--¡¡si tú misma lo viste en la revista... seguro que tienes miles de amantes¡¡
Sara siente muchos celos. No se da cuenta que Blanca lo que quiere es que se acueste con Guillermo por coraje.
--No tendría nada de malo que tú hicieras lo mismo por venganza...
--¡¡no¡ ¡¡yo no soy una perdida¡¡
--las mujeres tenemos derechos a divertirnos como a los hombres...
--¿y me lo dices tú? eres virgen.
--No, no lo soy...
--¿cómo?
--Es que me daba pena contigo pero la verdad es que he tenido muchos hombres, hombres de los que ni sé su nombre... No quiero que me juzgues pero... Estoy embarazada y no sé quien es el padre...
Sara está escandalizada.
--¿y qué vas a hacer? A la reina le da algo...
--Yo espero que tú no me juzgues...
--No claro que no... --Sara está muy sorprendida-- pero aún no sé como has sido capaz de eso...
Blanca quiere mostrarse liberal ante su amiga con la esperanza que ella se confíe y se convierta en la amante de Guillermo:
--Es que si los hombres se acuestan con las mujeres que sean... nosotras tan bien...
--La única razón que yo vea para que una mujer sea de otro hombre es que lo amo... Yo no amo a Guillermo, me gusta como amigo...
--almenos no renuncies a tu amistad con él...
--No sé...
--¡No seas tonta¡ tu marido se acuesta con otras y tú no puedes ni tener un amigo?
Sara sonríe:
--Me cae tan bien Guillermo...
--pues aprovecha y no renuncies a él... un amigo es un tesoro...
--no lo haré... no renunciaré a Guillermo...
Blanca siente culpa por estar traicionando a su amiga pero daría lo que fuera porque su amiga se enamorada de otro, de Guillermo.